Matthew McConaughey tiene un libro llamado "Green Lights" en el que habla acerca de cosas importantes que aprendió en su vida. Se los recomiendo porque es una historia de cómo resolver una vida que no tiene una receta.
La idea principal de McConaughey es que en la vida, a veces, nos encontramos con situaciones, eventos, oportunidades o personas que son "luces verdes" en la carretera que nos permiten seguir hacia adelante con impulso. Las luces verdes pueden ser descubrir un talento que no sabíamos que teníamos, conocer a alguien que nos abra una puerta o hasta salir con alguien y descubrir que nos gusta.
Por otro lado, la existencia de luces verdes implica la existencia de luces rojas, los obstáculos en la vida.
Este concepto me hizo pensar en el trayecto que hacía, en carro a las 6.30am, todos los días para llegar a la universidad. Había un tramo en Avenida 10 donde si lograba pasar el primer semáforo con luz verde, en el momento correcto, podía tener luces verdes en todo el tramo de 6-7 semáforos.
En 5 años de hacer el mismo trayecto me aprendí cuándo exactamente tenía que agarrar el primer semáforo para que funcionara, entonces podía desde 100m antes saber si lo iba a lograr o no. Si veía que no lo iba a lograr ni me estresaba y hacía el trayecto tranquilo, sin correr y me reía de los carros que trataban de acelerar porque sabía que no lo iban a lograr. Pero si veía que lo iba a lograr aprovechaba para tocar un poco más el acelerador y ganarme los 5-7minutos del trayecto.
Mi jueguito tonto en carretera se parece mucho a otros aspectos de nuestras vidas. Como dice McConaughey, todo en la vida tiene luces verdes y luces rojas—la idea es aprender a descifrarlas y correr cuesta abajo con las verdes y tener paciencia y no estresarse por las rojas.
En mi vida, he visto que aunque me tope con la luz verde perfecta no la aprovecho por falta de urgencia, o síndrome de impostor, por creencias externas, o por ver que los demás carros no la están aprovechando y creer que tal vez me la estoy imaginando. También me pasa que creo que esa luz siempre va a estar verde y que lo puedo hacer mañana.
Pero también me pasa que trato de forzar luces rojas para que funcionen y nunca funciona. Acelero y tengo que frenar y me estreso y me frustro porque nada está saliendo bien, pero claro, no van a salir bien porque las luces están rojas. En esos casos necesito poder relajarme, respirar, ir más despacio, reconocer el obstáculo y guardar la energía para los momentos en que sí me alineo con las luces verdes.
Poder ver las luces es el primer paso, pero no es suficiente, hay que poder usarlas.
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